Siempre me ha llamado la atención ese brillantito que sobresalía en algunas sonrisas. Se trata de un piercing, que realmente es una circonita, o también llamado Skyce.
Se coloca sobre la superficie del diente, con lo que no tenemos que dañar el esmalte ni hacer perforaciones, con lo que ya no habrá dolor que soportar. Hace años, los primeros que se colocaban sí que se necesitaba tallar el diente y por lo tanto, se quitaba el esmalte, siendo el piercing de por vida. Gracias a todos los adelantos, ahora hay una nueva técnica mejorada y como he dicho antes, menos aparatosa.