A todas nos gusta cambiar nuestra imagen, sobre todo si tenemos alguna fiesta o cena especial ya que siempre queremos ir a la última. Hoy vamos a ver cómo podemos cambiar nuestro peinado sin necesidad de cortar el cabello. Simplemente necesitamos un flequillo postizo.
En solo cuestión de segundos, podremos lucir un nuevo peinado sin haber visto las tijeras por ningún lado. Un flequillo postizo es la mejor opción para ir diferente durante unas horas.
No es complicado de poner, ya que esta pieza de pelo viene con la parte más corta que es la del flequillo propiamente dicha y dos mechones a ambos lados. Ellos se mezclarán entre nuestro cabello para un fin mucho más natural.
Para ir colocando nuestro nuevo peinado, primero debemos de separar dos mechones de cabello hacia atrás. Estos mechones son de la parte delantera, para que no nos estorben.
Los sujetaremos con dos horquillas y en ellas irá enganchado nuestro flequillo postizo. Es muy sencillo, ya que el pelo postizo dispone de dos aplicaciones a ambos lados para asegurarnos una correcta sujeción.
Una vez que lo tengamos enganchado, ya solo queda peinarlo bien para que no se note. Claro está que siempre debemos de elegir un tono muy parecido a nuestro color de cabello.
Puedes peinarlo todo hacia delante o dejar una especie de flequillo abierto como si lleváramos la raya al medio…es cuestión de gustos. Ahora podrás dejarlo así o hacerte un recogido…seguro que los impresionarás.