Tenemos una cita y queremos que caiga rendido, por eso, nos vestimos con nuestras mejores galas, nos maquillamos y peinados…pero falta algo ideal para completar este trabajo: el perfume. Pero el objetivo no está en vaciar el bote en nuestra piel, sino que siguiendo un par de consejos, podemos sacar el máximo partido a nuestro perfume.
Hay unas zonas estratégicas, donde podemos echar la fragancia y hacer que dure más, ya que son partes del cuerpo donde la sangre fluye con más fuerza. Primero en ambos lados del cuello, pulverizamos unas gotas de nuestro perfume favorito.
Otra zona clave es la nuca, pero sin que toque el pelo ni que corra por la espalda…solamente una gotita. Creo que una de las zonas donde la gente más usa la colonia es detrás de las orejas, cuando nos ayudamos de las manos para echarla, esto es, cuando el bote no tiene pulverizador.
Las muñecas también son ideales para ser perfumadas, ya que suelen estar siempre en contacto con el aire y esto ayuda a que el olor se expanda. Nunca debes echar la colonia sobre la ropa, ya que contiene alcohol y puede estropear nuestras prendas favoritas.